3.31.2010

España:Las remesas enviadas por inmigrantes repuntan en el último trimestre de 2009

Los inmigrantes redujeron en 2009 un 9,7% el envío de remesas. - El paro entre los extranjeros subió un 38,2% el año pasado

El País.- 2009 fue, sin duda, un año malo respecto a las ayudas que los inmigrantes enviaron a sus familiares desde España, pero los datos del último trimestre constituyen una pequeña invitación al optimismo. El envío de remesas ha vivido un respiro en el último periodo del año pasado: la cifra registrada entre octubre y diciembre (1.911 millones de euros) supone un aumento del 1,81% en comparación con la registrada en el mismo periodo del año anterior, algo que no ocurría desde el primer trimestre de 2008.

Han tenido que pasar siete trimestres. No obstante, los datos totales de 2009 empeoran los de años precendentes. Las remesas que enviaron sumaron 7.131 millones de euros, un 9,7% menos que el año anterior como consecuencia de la crisis económica, según los últimos datos publicados por el Banco de España.

La crisis ha pegado con especial dureza entre los inmigrantes: el envío de remesas empezó a descender en tasa interanual en el segundo trimestre de 2008 y se ha mantenido a la baja hasta los últimos meses de 2009, lo que pone de manifiesto el impacto de la recesión económica y el incremento del desempleo entre la población extranjera durante los dos últimos años: cerró 2009 con 296.800 desempleados más, un incremento del 38,2%, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa.

Los españoles también ayudaron menos

Por su parte, el dinero procedente de los españoles que viven en el extranjero descendió un 9,8% el año pasado, hasta los 4.820 millones de euros. Sólo en el último trimestre de 2009 la cifra cayó un 5,5% en comparación con el mismo periodo del año anterior, aunque mejoró si se compara con la cifra registrada entre julio.

3.22.2010

Julio Bobes vincula la alta tasa asturiana de suicidios con la emigración

¿Por qué encabeza Asturias la tasa de suicidios en España? ¿Por qué hay más muertes de este tipo en el Principado, pero también en Baleares y Cantabria? ¿Qué hace que Andalucía sea la comunidad con menos suicidas? Según el presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría, tiene que ver con la emigración.

Así lo asegura el catedrático en Psiquiatría y presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB), el asturiano Julio Bobes: “Las zonas con mayor incidencia son aquellas que históricamente se han visto más afectadas por la emigración de sus habitantes, quedándose en ellas los más desfavorecidos y susceptibles de suicidio”.
La explicación no sólo es novedosa, sino que, incluso, sorprende, ya que en su opinión, eso explicaría porqué Asturias lidera año tras año las tasas de suicidio en España.
Ésta es una de las conclusiones alcanzadas la semana pasada en la jornada que sobre ‘La conducta suicida’ se celebró en Madrid, y que contó con la asistencia de decenas de especialistas, entre ellas, la del catedrático Julio Bobes, pero también de la profesora titular del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Oviedo, quienes demandaron la puesta en marcha de programas preventivos, así como la creación de una red centinela en los servicios de urgencias de los hospitales.
En esta cita, donde se hizo un repaso de las últimas estadísticas, Asturias volvió a destacar con nombre propio, al ser, una vez más, la comunidad con la mayor tasa de suicidios del país.
En 2008, el Principado contabilizó 113 casos de suicidio, situándose a la cabeza de España. Tras Asturias están Baleares y Cantabria. En el extremo opuesto queda Andalucía, autonomía con menor índice. Además, durante 2008, los suicidios generaron más muertes que los accidentes de tráfico.
Los psiquiatras señalaron que los intentos de suicidio pueden estar motivados por una mezcla de factores genéticos y ambientales.
De hecho, los problemas con la pareja hacen que estas personas presenten un riesgo de suicidio 30 veces mayor que el resto de la ciudadanía, apuntó el profesor de Psiquiatría de la Universidad de Columbia (Estados Unidos), Enrique Baca.
Según señaló este experto, este tipo de conductas pueden estar provocadas por un componente hereditario, influido por el hecho de que tras el 90% de los intentos de suicidio hay algún trastorno mental subyacente. No obstante, más allá de estos factores genéticos hay un patrón conductual afectado por factores estresantes o de personalidad. También influye la falta de serotonina.
Los suicidios se cobran en Asturias más víctimas mortales que los accidentes de tráfico. Según los últimos datos hechos públicos el Instituto Nacional de Estadística, las personas que se quitaron la vida en el Principado son bastantes más que las que murieron en carretera. Las cifras son contundentes: 113 asturianos se suicidaron en 2008 frente a los 64 que fallecieron en accidentes de tráfico.
Las muertes por suicidio ganan terreno en Asturias entre las consideradas como ‘muertes por causas externas’ y dejan en un segundo plano a las generadas por siniestros al volante. Esta tendencia, que se repite también en todo el territorio nacional, ya se había observado un lustro atrás en el Principado. Entonces, la Consejería de Salud llegó a elaborar un plan regional para el abordaje de las conductas suicidas en la región. Lo hizo también tras constatar que la comunidad encabezaba el ranking de mortalidad por suicidios.
Pero no todo es tan negativo a la hora de analizar la mortalidad en el Principado, ya que el suicidio pasa al primer puesto no porque haya habido muchos más casos, sino porque descendió el número de fallecidos en accidentes de tráfico.

Fuente: Asturias en el Mundo, Crónicas de la Emigración

3.17.2010

Voluntarios transforman objetos abandonados en el desierto en piezas de arte

Por María León

Tucson (Arizona), 2 mar (EFE).- Un grupo de voluntarios en Arizona transforma los objetos que los inmigrantes dejan en el desierto en piezas de arte con lo que buscan crear conciencia sobre las muertes de los indocumentados en la frontera.

"Los Desconocidos" comenzó como un programa de reciclaje en el desierto de Arizona en 2007.

"Mientras limpiábamos y recogíamos los objetos dejados por los inmigrantes y los tirábamos en la basura, un día se me ocurrió que esos objetos podían volver a utilizarse y crear con ellos un programa de educación", dijo a Efe Jody L. Ipsen, directora ejecutiva y fundadora del grupo.

El desierto de Arizona (EUA) y Sonora (México) es el principal corredor de cruce de indocumentados. Es aquí donde se arresta a más del 40 por ciento de los inmigrantes sin papeles en toda la frontera entre los Estados Unidos y México, de acuerdo con la Patrulla Fronteriza.

Ipsen explicó que a su paso los inmigrantes dejan todo tipo de objetos, como galones de agua, ropa, latas de atún, zapatos, cartas, libros, biblias, mochilas y fotografías, entre otros.

Los más de una docena de voluntarios que integran "Los Desconocidos" reciclan los contenedores de plástico y la ropa que encuentran.

Los pantalones de mezclilla los lavan y aquellos que se encuentran en buenas condiciones son utilizados para crear una línea de morrales y bolsos que son adornados con objetos dejados también por inmigrantes como agujetas, botones, hebillas de zapatos, etc.

Lo mismo hacen con cruces de madera, las cuales son tapizadas con la mezclilla y son adornadas con diferentes elementos, desde paquetitos vacíos de salsa picante, imágenes religiosas y tapas de refrescos.

"Esta cruz la adornamos con las piedritas de una blusa de niña que encontramos", relató Ipsen mostrando una de las piezas.

"Todos estos objetos realmente me tocan el alma, el solo pensar en todas estas personas que traían consigo estas cosas, quizás lo único que tenían y lo tuvieron que dejar", sostuvo.

El costo de los productos hechos con los objetos dejados por los inmigrantes indocumentados oscila entre 1 y 90 dólares.

"Cada bolsa es un recordatorio de que los inmigrantes sufren al cruzar la frontera y para muchas personas tiene un significado más profundo el poder llevar algo que traían consigo los migrantes", enfatizó la voluntaria.

Ipsen señaló que el dinero de las ventas es utilizado para financiar los viajes a la frontera, la limpieza y fabricación de las bolsas y cruces, así como para un programa que busca concientizar sobre los cientos de fallecimientos de indocumentados que cada año se reportan en Arizona.

Desde el 1 de octubre de 2009 y hasta el pasado 8 de febrero se habían registrado 61 muertes de indocumentados en la frontera de Arizona, 16 más que el año pasado durante las mismas fechas, según estadísticas de la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona.

Mientras que la Patrulla Fronteriza ha reportado durante los primeros cuatros meses del año fiscal 2010, 57 fallecimientos en el desierto de Arizona.

Otro proyecto que "Los Desconocidos" es la creación de una manta hecha con cuadros de la ropa de los inmigrantes encontrada en el desierto, uno por cada persona fallecida en el Sector Tucson de la Patrulla Fronteriza en Arizona.

"Nuestro objetivo es hacer una manta por cada sector de la Patrulla Fronteriza en EEUU", dijo Ipsen.

Cada cuadro en la manta tiene el nombre del indocumentado fallecido, pero la gran mayoría solo dice "desconocido" o "desconocida" ya que un gran porcentaje de los cuerpos nunca son identificados.

"Es muy triste pensar que estas personas murieron y ni siquiera sabemos sus nombres", finalizó la activista.EFE

3.15.2010

8.000 catalanes, de 40.000 españoles, emigraron en 2009

La emigración hacia el extranjero y la nueva normativa de acceso a la nacionalidad disparan las inscripciones consulares. El CERA (Censo Electoral de Residentes Ausentes) se incrementa en 69.000 nuevos inscritos. 6.000 catalanes emigraron en el año 2008 y se estima que 8.000, de 40.000 españoles, lo hicieron en el año 2009. Las perspectivas de aumento de la emigración española y catalana son aún mayores en 2010, según un informe de la Federació Internacional d’Entitats Catalanes(FIEC), hecho público en este mes de marzo.

La Federación considera que era un hecho cantado, que la presente situación económica no iba a dejar indiferentes a muchos de los que se encuentran en este momento, en España o en Cataluña, en situación de desempleo o de empleo precario. Sostiene que buscar oportunidades de trabajo fuera de España es y ha sido una constante a lo largo de la historia en Cataluña y para muchos, después de más de un año de crisis en el mercado laboral, la emigración aparece como una de las pocas salidas posibles.
Estima que, al mismo tiempo, la presente crisis, especialmente en algunos países latinoamericanos, ha producido como consecuencia de las medidas adoptadas por el Gobierno español en materia de nacionalidad, que permiten la recuperación de la nacionalidad española a los descendientes de emigrantes y exiliados españoles, un incremento de expedientes de recuperación de la nacionalidad que se están resolviendo satisfactoriamente en la mayoría de países latinoamericanos (especialmente Cuba, Venezuela, Argentina) aún cuando algunos servicios consulares no llegan a poder prestar el servicio en plazos razonables habida cuenta del gran número de solicitudes.
Las demandas de recuperación de la nacionalidad, recuerda, se basan en la modificación del Código Civil en materia de nacionalidad de diciembre de 2007 y en la ley 52/2007, conocida como Ley de la Memoria Histórica. Su Disposición adicional séptima facilita la adquisición de la nacionalidad española a los descendientes de emigrantes y exiliados.


Aumento del CERA
El Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) se incrementó en 69.000 nuevos inscritos entre los meses de enero y diciembre de 2009 pasando, gracias a este crecimiento, de 1.237.832 votantes a comienzos de año a 1.306.172 once meses después, indica. En el caso de Cataluña los inscritos en el CERA con derecho a voto en las próximas elecciones de noviembre de 2010 aumenta en casi 8.000 personas pasando de 117.243 en enero a 124.958 en diciembre de 2009.
Considera que la nueva normativa de acceso a la nacionalidad –que comenzó a aplicarse el 29 de diciembre de 2008– puede explicar ese incremento, el más alto en los últimos siete años, en algunos países de América Latina que, de momento, por su situación económica no constituyen destinos preferentes de emigración para quien quiere buscar oportunidades laborales fuera de España.
Argentina ha sido el país en el que más se han incrementado los inscritos en el CERA (16.295 personas). En Cuba el aumento también ha sido significativo, 8.202 nuevos registros, y también en Venezuela con 7.502. Otros países con un crecimiento notable del número de censados han sido México, 6.071; Uruguay, 4.744; y Ecuador, 4.137. En todos estos casos la nueva normativa de nacionalidad puede explicar por sí sola el aumento en el CERA, afirma.
Sin embargo, señala, otros crecimientos de inscritos como los que se observan en Brasil (3.484), Estados Unidos (3.163), Chile (1.905), Francia (1.211) o Suiza (997) parecen combinar ambos fenómenos: nueva emigración española (seguramente en una proporción de más del 50% de los nuevos inscritos) y recuperaciones de nacionalidad.
Aprecia asimismo que los datos de crecimiento de inscritos en el CERA en otros países resultan difíciles de explicar sólo con recuperaciones de nacionalidad y parecen indicar un evidente desplazamiento de personas buscando oportunidades laborales (y sin duda encontrando esas oportunidades ya que en otro caso no tendría sentido que procedieran a la inscripción consular). Es el caso, por ejemplo, de: Reino Unido (1.492), Alemania (1.259), Bélgica (911), Italia (556), Australia (555), Países Bajos (414), Suecia (211), Canadá (325), China (220), Turquía (156), Nueva Zelanda (82) o Luxemburgo (79).


Estadística de Variaciones Residenciales
Por otra parte informa de que los datos oficiales de la Estadística de Variaciones Residenciales que elabora el INE (Instituto Nacional de Estadística) están disponibles hasta el año 2008. En 2008 fueron 34.453 los españoles que abandonaron España para instalarse en otros países. Entre ellos 5.966 catalanes, lo que convirtió a Cataluña, en 2008 y en números absolutos, en la segunda comunidad productora de emigración en España después de Madrid (8.195) y por delante de otras comunidades tradicionalmente emigrantes como Galicia (2.971) o Andalucía (3.867).
La estimación sobre los datos conocidos del CERA de 2009 y las tendencias apuntadas en la estadística del INE de 2008 permiten a la Federación suponer que más de 40.000 españoles han abandonado el país en 2009 y entre ellos, probablemente, más de 8.000 catalanes.
La entidad considera necesario recordar que pese a esa situación, la misma estadística sobre el saldo migratorio en España registra 726.009 llegadas en el año 2008 (extranjeros y españoles retornados contados juntos) y 266.460 salidas (extranjeros, retornados y españoles emigrantes contados juntos) con un saldo de nueva población positivo de 459.549 personas. En Cataluña fueron 176.613 llegadas (extranjeros y españoles retornados contados juntos) y 81.326 salidas (extranjeros retornados y españoles emigrantes contados juntos), lo que arroja un saldo de nueva población positivo de 95.287 personas. La integración de los nuevos españoles o de los ‘nous catalans’ continua siendo, incluso en períodos de crisis como el actual, uno de los mayores retos de la sociedad española, indica.

Así pues en sólo dos años alrededor de 15.000 catalanes han dejado Cataluña para instalarse fuera del Estado español. Desde 2005 son más de 25.000.


Previsiones para 2010 y 2011

No es posible establecer con precisión cuál va a ser el comportamiento migratorio de los españoles y de los catalanes en 2010 pero los datos recogidos por la FIEC (Federació Internacional d’Entitats Catalanes) entre diversos ‘casals’ catalanes del exterior apuntan a un crecimiento muy significativo del número de consultas sobre la situación del mercado de trabajo y de la vivienda en ciertos países y a un crecimiento más que probable y sostenido de la emigración española y catalana hacia países que se considera pueden ofrecer oportunidades laborales. Una tendencia que, sin duda, se mantendrá en 2011.
Un problema relevante que aparece a la hora de elaborar estos datos es que, principalmente en Europa, mucha de esta emigración es ‘espontánea’, es decir que parte a la aventura sin un contrato de trabajo previo y no se registra ni en el consulado del país de acogida ni se da de baja en su municipio de origen. Solamente cuando consolida su situación se da de alta en el CERA.
Por ello es posible que los datos de la estadística del INE o del CERA, que se basan en registros administrativos, minusvaloren la realidad y no reflejen la totalidad de los movimientos migratorios hacia el exterior, advierte.


La influencia de la televisión
Aún cuando lo identifica como un dato colateral, mantiene que no hay que ignorar el gran éxito de audiencia que en todas las cadenas televisivas del Estado español registran los programas dedicados a los españoles residentes en el exterior. Valora que ‘Españoles en el mundo’ en TVE; ‘Afers Exteriors’ en TV3; ‘Madrileños en el mundo’ en Tele Madrid; ‘Callejeros viajeros’ en Cuatro; ‘Valencianos en el mundo’ en Canal 9; ‘Andaluces en el mundo’ en Canal Sur, etc., son vistos por millones de personas que no sólo miran por curiosidad dichos programas sino que reciben una información que en muchos casos contribuye a adoptar una decisión tan difícil como es la dejar el país de residencia a la búsqueda de otras oportunidades.
Para la FIEC no se trata de que en Cataluña o en España se implemente una política activa de colocación de excedentes laborales en países extranjeros como se hace, más o menos explícitamente, en otros países (caso de Portugal en la UE o en algunos países africanos o asiáticos). La FIEC ya llamó la atención del Govern de la Generalitat sobre esta realidad migratoria durante el Consell de las Comunitats Catalanes del’Exterior de diciembre de 2009 y entiende que, especialmente en los países en los que se está produciendo una significativa llegada de emigración catalana los recursos para asesoramiento en los centros catalanes de esos países deben ser debidamente aumentados y desde el Govern no debería ocultarse una realidad que la tozudez de las cifras y de las estimaciones no puede desmentir y debería, desde el ‘Departament de Treball’ o desde Vicepresidencia, coordinarse una actividad de seguimiento y asesoramiento para quienes deciden abandonar Cataluña y España no por exotismo sino por necesidad.
El informe añade que conviene no olvidar que aparte de los 125.000 catalanes mayores de 18 años con derecho a voto que se reflejan en la estadística de inscripciones consulares del CERA hay que añadir los menores de 18 años, los que han adoptado la nacionalidad del país de acogida, las segundas y terceras generaciones (principalmente en América) y las migraciones hacia otras comunidades autónomas del Estado español. Es decir unos 400.000 catalanes residiendo en el exterior.
Finaliza sosteniendo que Cataluña es, ha sido y será un país de acogida de inmigración procedente de todas partes pero en muchos momentos de su historia, por más o por menos tiempo, por razones políticas o por razones económicas, es, ha sido y será también país de emigración.

3.04.2010

"Aquí no pasan negros. Queremos mantener un rollito español"

Foto: Carlos Rosillo


J. ABDELRAHIM / S. GIMENO
- El País

"Hay sitios donde siempre hay una excusa para los negros", lamenta Andy. Este nigeriano, vecino de Torrejón de Ardoz desde hace nueve años, casado con una española y con un hijo, asegura que en algunos bares del municipio no se permite la entrada de inmigrantes por sistema. EL PAÍS fue este fin de semana con él y con otros extranjeros a comprobar si existe esta prohibición en Torrejón, donde 26.000 de los 116.000 habitantes son extranjeros, un 22%. La siguiente escena es una muestra del trato que reciben.

Viernes 29 de enero. Dos de la madrugada. Puerta de la discoteca Bianco. Andy, de 34 años, se acerca a los porteros de este establecimiento situado en una zona repleta de locales en la avenida de la Constitución. Detrás de él camina un chico blanco, periodista.

-Buenas noches -saluda Andy a los porteros.

-Lo siento, no puedes pasar -responde uno de ellos.

-¿Por?

-Para pasar hoy hace falta invitación.

-¿Y dónde se consigue?

-Ya no se puede conseguir.

El periodista, que guarda el siguiente puesto en la fila, solicita también la entrada.

-Ya lo has oído, hoy se necesita un pase especial -se disculpan los porteros. Andy aún está presente.

-Vale, al menos dejadme avisar a unos amigos que tengo dentro -responde el periodista.

-Pasa.

Cuando el redactor accede al local, otros clientes confirman que ellos no entraron con invitación. Uno de los porteros que estaba en la puerta toca su hombro.

-Macho, ¿pero tú vienes con el chico negro que está fuera o no?

-No, para nada.

-¡Ah, vale!, es que no sabía si veníais juntos. Verás, no hay ningún pase especial. Es que él no puede entrar porque es negro. Tú te puedes quedar perfectamente.

-¿Y él no porque es negro?

-Sí, ya sabes. Aquí queremos un rollito español. No dejamos pasar a negros.

Andy ya sabía lo que iba a pasar "por experiencia". Él mismo eligió esta discoteca de entre las varias que aseguraba que le impedirían el paso. Colectivos de inmigrantes como la asociación dominicana Juan Pablo Duarte han denunciado reiteradamente que sufren diferencias de trato por parte de la Administración local y empresas privadas por el simple hecho de ser extranjeros. Entre sus quejas destacan el acoso que reciben en forma de multas y visitas policiales a sus negocios, la imposibilidad de abrir establecimientos como locutorios o bazares debido a una ordenanza municipal que IU tacha de "xenófoba", o la dificultad para entrar en determinados locales sólo por el color de su piel.En este último caso, la peculiar prohibición también se da en locales vinculados con miembros del Gobierno local, el vicealcalde de Torrejón, José Luis Navarro, y el concejal de Vías, Obras y Medio Ambiente, Valeriano Díaz, ambos del PP.

Según el Registro Mercantil, Navarro, que también es concejal de Urbanismo, figura como ex administrador único del local Remember en la calle del Caucho de Torrejón. Actualmente, su hermano administra la sociedad. Algo parecido sucede con Díaz, aunque en este caso es su mujer la que administra la empresa. Su bar, el Nará, en plena avenida de la Constitución, es uno de los negocios nocturnos con más proyección en el municipio.

Gilbert y Wilson son dos vecinos dominicanos. Esta noche se han vestido pintones. Los dos muchachos se presentan en la puerta del bar Nará para salir de marcha. Los porteros les impiden el paso. "Se celebra una fiesta privada del Ayuntamiento", comenta uno de los empleados de seguridad cortando su paso con la mano. A pesar de su insistencia, los dos chicos tienen que irse. Tan sólo 10 minutos más tarde, dos españoles sin invitación para la supuesta celebración del Consistorio se acercan a la puerta. Ni había fiesta ni había que pagar. Los mismos porteros les abrieron las puertas. En el interior del local no se ve ni a una sola persona negra.

En una última intentona, un español acompaña a Andy hasta el mismo bar, el Nará. El objetivo es saber si ir acompañado de un blanco es suficiente salvoconducto para entrar. Al menos en esta ocasión, sucede así. "Mira. Soy el único negro del garito", comenta con sorna el inmigrante.

La siguiente parada es la discoteca Remember, un poco más alejada del centro urbano, propiedad del hermano del vicealcalde. Andy trata de acceder sin éxito. La razón en esta ocasión es el calzado deportivo. "¡Pero si este chico que está entrando también lleva zapatillas!", protesta Andy señalando a un español que pasa al interior del local. "¡Ah!, pero es que... es por la gorra", responde otro cancerbero.

No todos los locales de Torrejón prohíben el acceso a los inmigrantes, pero Andy asegura que la situación se repite con frecuencia, no sólo en los locales vinculados con miembros del Ayuntamiento. "Una vez fui a un local con mi mujer española y otra pareja, los tres blancos. ¡Dejaron pasar a todos menos a mí!".

Para terminar, Andy prueba suerte en otra discoteca elegida al azar, Pícaro. "Ya verás como en ésta tampoco", apuesta Andy.

-Buenas noches.

-Lo siento. El local es sólo para rumanos. No pueden entrar ni los españoles.

-¿Para rumanos? Pero, si están saliendo también españoles.

-Serán las parejas. Yo te aseguro que aquí no dejo pasar ni a uno que no sea rumano o acompañante de rumano.

Media hora más tarde, un periodista español, sin acompañantes rumanos, se acerca a la puerta del Pícaro.

-Buenas noches.

-Adelante.

Como Andy, los dominicanos Gilbert y Wilson están más que acostumbrados a que no les dejen pasar en muchos locales de Torrejón. Pero eso no impide que cuestionen el porqué de la negativa. Esa noche, ambos se marchan al vecino municipio de Alcalá de Henares para seguir con la fiesta. "A mí me hubiera gustado entrar en el Nará; seguro que por dentro está genial", comenta Gilbert antes de despedirse.

3.03.2010

Nota crítica sobre Nómada

instalaciones Viajeras y Una sola tierra, de Elizabeth Ross

“La emigración es la combinación de la esperanza humana y el movimiento.
La esperanza se realiza a través de la noción del movimiento.
La gente va a seguir buscando mejorar su vida mediante el movimiento…
Eso es irreversible y está en el núcleo del pensamiento humano.”

Ryszard Kapuscinski

Mientras en la planta baja del Museo de Arte Contemporáneo “Alfredo Zalce” se dedica una exposición a “la mujer”, en la planta alta se presenta una muestra sobre “las mujeres”, cambio que no sólo va de lo singular a lo plural conforme uno va subiendo las escaleras, sino que también particulariza en un asunto (bastante) general: mujeres concretas, diversas, procedentes de lejos y cerca, con diferentes rutas y experiencias, atravesando a pié los territorios de la migración.

Un medio predominante en Nómada… las mujeres se mueven es la videoinstalación: monitores con cédulas de (abundante) información, cuartos oscurecidos para proyección de entrevistas o secuencias, videos testimoniales y no, manipulación de imagen digital. Todas son sonoras, con un volumen que permite la buena apreciación de la música y palabras en cada una; ello hace que en el punto medio entre salas se capte una multitud de sonidos dispares, provenientes de los cuatro puntos de la planta, la sala no está en paz, no hay silencio ni descanso, no está vacía de gente… hay gente ahí, no sólo “obra”.

Las dos primeras videoinstalaciones son obra de Elizabeth Ross, coordinadora del proyecto; en la primera, que le da nombre a la muestra, tendederos con sábanas blancas de diferentes tamaños son soporte y escenario sobre cual se proyectan pies andando por vías variadas: nieve, asfalto, loza, alfombras, escaleras. Una voz se pronuncia: Las mujeres se mueven dejando atrás el pasado, honrando lo que han sido, agradeciendo lo que viene y lo que será. Las mujeres se mueven, queman sus naves.” La forma de las tomas, hasta 4 pares de pies vistos de arriba hacia abajo, muestra el trayecto por donde la vista se desplaza. No se ven distancias, sólo piernas que suben y bajan escalones, pendientes, pasan de una superficie a otra. La mirada viaja en forma vertical, no horizontal; cada par de pies es semejante con los otros. “La perspectiva nómada trata de la coexistencia no de la distancia” dice un texto de John Berger citado en el video. Las mujeres coexisten en el mundo, las distancias entre naciones no las separan cuando son atravesadas por un mismo fenómeno; sus pisadas, aquí y allá, cruzan caminos semejantes.

La existencia de cada mujer puede llevarle a diferentes geografías a través de los calendarios. Una sola tierra conjunta frascos que contienen este material procedente de varios puntos de nuestro país y del globo. El andar de las mujeres es diverso, pero el camino de cada una es único.

Todas y las mariposas presenta imágenes digitales realizadas por tres de las artistas colaboradoras: Cristina Fernández, Teresa Puig y Dorothea Fleiss. Algo destacable es que al final de la secuencia se incluyen los nombres de aquellas mujeres que son reconocidas en la segunda parte de la exposición: mujeres habitantes de comunidades de Michoacán, mujeres migrantes en países europeos. Aparece un nombre tras otro “grabado” sobre un bloque de piedra depositado en el suelo, marcas ígneas que prefiguran las historias que, a través de dos videoinstalaciones más, puede conocerse.

Los retratos intervenidos con cartas dirigidas a seres queridos y ausentes (padres, parejas, hijas) por causa de la necesidad de migrar y los Velices de identidad, obra de artesanas de Cucuchucho, tienen un peso testimonial dominante frente al valor artístico contemporáneo que se les ha querido imprimir por el hecho de ocupar un sitio en la galería. Quien esto escribe ha escuchado en más de una ocasión la referencia del ready-made y la descontextualización como estrategias para someter a los objetos personales identitarios a la transfiguración que les eleve a la condición de arte. En el marco de una concepción estética que privilegia el “momento de arte” por sobre “la obra”, esto parece verosímil. Pero no precisan de dicha transformación. Los velices son testimonios, objetos depositarios de experiencias concretas acerca de la conciencia propia de vivir una condición migratoria.

La misma obra expuesta puede ser, incluso, desmembrada. Los velices elaborados de chuzpata se encuentran a la venta sin los objetos que contienen, a manera de contribución a la producción de esta artesanía. El objeto deja de existir, la forma se desintegra, la obra es efímera: se convierte en acto performático (aberración lingüística de la jerga artística contemporánea) o instalación. Pero los velices bien pueden comprenderse como resultados del taller que Elizabeth Ross sostuvo con las participantes michoacanas del proyecto. En ello asientan su valor. Objetos íntimos a los ojos de tod@s.

Nosotras nos quedamos nos enfrenta más estrechamente con las vivencias de Josefina, Guadalupe, Lucía, Florinda y Herminia en torno a la migración de los varones. ¿Cómo es tu vida cuando él no está? ¿Cómo es cuando él regresa por un tiempo? Unas manifiestan gusto por la compañía de su querido, pero hablan claro sobre el sentirse más libres cuando él no está; la presencia del varón las limita, a una de ellas le lleva a vivir “a las carreras”, quedándose más tranquila cuando ella es propietaria de su tiempo. ¿Cuál es su realidad como mujeres solas? ¿Cómo subsisten y cuidan de ellas mismas, tomando la cabeza de sus familias y comunidades? Son muchas las respuestas, todas marcadas por la presencia de una “fuerza interna que hace que tantas mujeres encuentren a golpe de voluntad un lugar en el mundo. Otro.”

Publicado en el suplemento Letras de Cambio
Diario Cambio de Michoacán
23 de agosto 2009

¿Toleramos el machismo si es musulmán?

Se acerca el 8 de Marzo, día que permite volver a puntualizar los aspectos de opresión de las mujeres en el mundo. Aparecen en los medios notas sobre el tema, ensayos, investigaciones que nos permiten -o les permite a la sociedad que tiene alcance a éstos- un momento de atención al tema. Si este momento, este conocimiento obtenido causa algún efecto benéfico es otra cosa. Si entra y sale por los oídos es otra cosa. Si quien escucha es quien de por si tiene el interés y está en el tema, es otra cosa. Pero sabemos que una gran mayoría ni lee, ni presta atención, ni quiere hacerlo. Todo lo contrario, Hay que contrarrestar la conciencia para que las cosas sigan bajo control. La crisis es buen pretexto para hacerlo. La xenofobia. La intolerancia, ya sea religiosa o social o como se le quiera llamar a esa negación del (la) otr@. especialmente si es "otra", si es de una cultura diferente, si no encaja en los parámetros ortodoxos occidentales.
O no, o lo políticamente correcto es dejar que ese otro, esa otra, vivan o malvivan con sus usos y costumbres que al fin son suyos.
¿Complejo? mucho.

En fin, me robé este reportaje de Ferrán Balsells aparecido hoy en El País. Toca un tema delicado. El asunto aqupi es: quién debe tolerar ese machismo??


FERRAN BALSELLS
, El, País, 0
3/03/2010

Mujeres encerradas en casa para evitar que se relacionen, sin conocimiento del castellano, relegadas a una suerte de clausura por maridos que rechazan integrarse y no dejan integrar. El retrato podría ser de otro siglo, pero pertenece al colectivo musulmán que la alcaldesa de Cunit (Tarragona), la socialista Judit Alberich, describió ante el juez el año pasado en su declaración por un supuesto caso de acoso en el municipio. Fatima Ghailan, ciudadana española de origen marroquí y mediadora cultural de la localidad, denunció por coacción a cuatro miembros de la comunidad islámica del municipio, entre ellos el imán. La instrucción judicial refiere que la hostigaban por motivos como tener un empleo, conducir un coche y no llevar velo. En el supuesto acoso, ofrecieron a su marido casarse con otra mujer.

La batalla por desarmar el machismo en la sociedad española contrasta con estos hábitos, arraigados en parte del colectivo musulmán y consentidos por la Administración. "No se trata de un machismo inherente al musulmán", aclara Bernabé López, catedrático de Historia del Islam Contemporáneo en la Universidad Autónoma de Madrid. "Es un problema larvado de una sociedad patriarcal y rural. El islam que está viniendo a España es el de periferias urbanas, no ilustrado. Añaden a sus creencias una barbaridad que se debe combatir pese a que el factor religioso dificulta abordar el asunto", precisa.

Alberich lo abordó mediando entre las partes para evitar un conflicto en la comunidad musulmana de la localidad, lo que algunos consideran una concesión excesiva, algo que no se habría permitido entre miembros de otra religión. "Es un buenismo peligroso y mal entendido", señala José María Contreras, director general de Asuntos Religiosos del Ministerio de Justicia, entidad que ejerce de enlace entre el Gobierno y los cerca de 1,3 millones de musulmanes residentes en España, en su mayoría de origen marroquí. "El límite de la libertad religiosa es el de las libertades fundamentales. Ante una denuncia la respuesta es ponerse, con todas las cautelas, del lado del denunciante. De lo contrario esa tolerancia implica una rendición de la libertad individual", detalla. En el camino hacia la paz social de Cunit las denunciantes como Ghailan son animadas a retractarse para mantener el orden vigente. El caso también alerta sobre si contemporizar con el aislamiento femenino de una comunidad aborda el problema o da aliento a perpetuar la situación. "En toda mediación debe fijarse una línea roja que no se puede cruzar", razona Contreras. Ghailan mantuvo la denuncia, y la Fiscalía pide ahora penas de entre cinco a dos años de cárcel para los presuntos acosadores.

"El límite es negarse a fomentar comunidades marginadas. Cuando el conservadurismo extremo se excusa en el islam para no participar en la sociedad, hay que combatirlo", resume Mohamed Chaib, diputado autonómico del PSC y único representante político español de origen árabe y español, fuera de Ceuta y Melilla.

Chaib llegó a Sant Boi de Llobregat (Barcelona) procedente de Tánger a finales de los sesenta, un niño en uno de los primeros escenarios de acogida de la inmigración marroquí. "Había padres que no dejaban a sus hijas relacionarse con otros jóvenes, pero colaboramos con ellos hasta romper esa tradición. Se debe pelear en estos terrenos que parecen religiosos pero no lo son", señala antes de admitir que la política evita ese debate "por incómodo".

Parte del colectivo musulmán corrobora la falta de implicación que lamenta Chaib. "La Administración fomenta que la intromisión en las comunidades musulmanas parezca algo prohibido. Que los líderes se aferren a su cargo como si fuera una monarquía", se queja Mimon Jalich, musulmán nacido en Melilla y secretario general de la Unión de Centros Islámicos de Catalunya. Su perspectiva dibuja un colectivo fragmentado y receloso de ceder influencias ante el resto de comunidades, estructuradas como una suerte de taifas. En España hay cerca de 1,3 millones de musulmanes y 740 oratorios registrados, además de varios centenares de centros que funcionan de forma alegal. Al margen de una docena de grandes mezquitas, el resto son centros precariamente habilitados en pisos, naves o garajes, regentados por colectivos poco permeables entre sí. "Sólo se consienten los puentes justos y necesarios. La Administración acaba implicando a una parte minoritaria de la comunidad, por lo general la menos necesitada", lamenta Jalich.

La relación entre las administraciones y los ciudadanos españoles de origen marroquí fluye a través de entidades religiosas, culturales y deportivas. Pero la desestructuración del colectivo deja a gran parte de inmigrantes al margen de ese flujo. "En ese espacio viven musulmanas agredidas por sus maridos que las amenazan con devolverlas a su país de origen, esposas en situación irregular que no denuncian abusos por temor a ser expulsadas, y otras que abandonan a su pareja y terminan en la calle sin recurso alguno", relata Laure Rodríguez, trabajadora social y musulmana conversa que dirige la Unión de Mujeres Musulmanas de España.

Las mujeres que se rebelan suelen hallar el desamparo de una sociedad que no las contempla. "La mayoría terminan en la calle y en la prostitución. Ni tienen estudios ni logran de qué trabajar porque tampoco conocen el idioma", precisa Hadar Saabi, musulmana marroquí y ponente de varios congresos de feminismo islámico en España. Se trata de espacios contemplados ocasionalmente para hacer valer la Ley de Extranjería pero ignorados en políticas de igualdad. "No nos llegan. La Administración no presiona porque ha cundido la idea de que el islam justifica el maltrato, la inferioridad de la mujer. Domina una tolerancia que hace fracasar a la igualdad de género para la mujer musulmana. La sociedad ha asumido este esquema mental y nos ha vuelto invisibles", protesta Rodríguez.

La Administración teme pisar cristales en este terreno donde algunos ayuntamientos batallan desde hace años. "Las autoridades deben ser conscientes del discurso que manejan. No vale todo", razona Juan Francisco Iborra, responsable de inmigración de Roquetas de Mar (Almería). El municipio lleva décadas gestionando una fuerte presencia de colectivos musulmanes de origen subsahariano y marroquí que representa ya el 25% de la población. Hace dos veranos prendieron la localidad en una serie de violentas revueltas tras el asesinato de un senegalés. "Debe afrontarse con cautela, paso a paso. Con la mediación hemos logrado una convivencia aceptable pero requiere colaboración y gestos claros". Iborra pone un ejemplo: retrasó la apertura de una mezquita porque se insistía en mantener un acceso para hombres y otro para mujeres. "En un lugar público es ilegal. Les insistimos en que el ámbito de lo público se regula por la ley española. Ahora el local está abierto".

El Gobierno conoce la lección. "El Islam como religión es compatible con la democracia, como cultura introduce elementos difíciles de compaginar. Españoles y musulmanes debemos distinguir entre una cosa y otra, exigir el reconocimiento de la mujer es esencial para abrir esa brecha", asevera el director general de Asuntos Religiosos. Contreras traza la ruta: el islam deseado arranca con el conocimiento de la lengua, sociedad y leyes españolas; prosigue aplicando una igualdad de género efectiva y desemboca en una religión tolerante con la disidencia entre sus miembros. "No podemos decir al colectivo islámico que trabajamos para que un musulmán pueda dejar de creer el día de mañana", frena el parlamentario Chaib. "El no creyente es inconcebible para el mundo musulmán. Se puede ser más o menos practicante, por ahora no hay más", apunta. "Es cuestión de tiempo", atempera Abdennur Prado, musulmán converso presidente de la Junta Islámica Catalana y director del Congreso Internacional de Feminismo Islámico.

No hay datos, pero se estima que hay unos 30.000 conversos al islam en España. Encarnan la parte más progresista y menos representativa, y aspiran a convertirse en la bisagra que articule el islam anhelado por el prisma occidental. "El punto de partida es la igualdad del hombre y la mujer, valor que el islam comparte. Pero el Gobierno debe volcarse, ignora lo que ocurre a pie de calle", asegura Prado. El diálogo entre el Gobierno y el islam no llega a la calle porque se pierde en otras esferas. El Estado legitimó en 1992 a la Comisión Islámica de España como interlocutor para cuestiones religiosas relacionadas con los musulmanes, entidad vista con recelo por algunos musulmanes dados sus intereses afines a la monarquía marroquí. "Hay quien viene a España huyendo del acoso del régimen de Marruecos y aquí topan con más de lo mismo", advierte Prado.

"Estamos trabajando en otros medios porque la Comisión ya no es representativa", admite Contreras. "El Gobierno impulsa leyes de paridad pero en la Comisión Islámica no hay rastro de una sola mujer musulmana. Tampoco permiten a las mujeres acceder a la mayoría de mezquitas. Nadie les presiona para cambiarlo", pone el dedo en la llaga Saabi.

La lección falla en un momento delicado. "El musulmán ya no es inmigrante, a partir de ahora es español y la sociedad debe normalizar su presencia", advierte José Manuel López, director de la Fundación Pluralismo y Convivencia, creada por el Gobierno en 2004 para promover la integración de creencias religiosas minoritarias. En las aulas converge ya una segunda generación de musulmanes españoles compuesta por 200.000 jóvenes nacidos o criados en España. Europa conoce los riesgos del proceso: el modelo francés sigue debatiendo sobre la identidad de los cinco millones de ciudadanos musulmanes después de cuatro generaciones en un proceso de asimilación que se reconoce desbordado. "¡Qué fracaso sería para España perpetuar el machismo que colectivos musulmanes arrastran de una remota sociedad rural!", cuenta alarmado el diputado Chaib. "¡Qué desastre si los hijos de musulmanes no reconocen nuestros valores porque el país no les ha tenido en cuenta!", añade y, sin quererlo, su tono resuena a inquietante profecía.

La crisis económica radicaliza a la sociedad en contra de la inmigración


TOMÁS BÁRBULO - El País, Madrid - 03/03/2010

La crisis ha endurecido la opinión que los españoles tienen de la inmigración. A medida que las cifras económicas se hunden, resulta más difícil reconocer a la sociedad tolerante y generosa con los extranjeros de hace sólo tres años. Ésa es la cruda conclusión que se obtiene después de repasar las 394 páginas del informe Racismo y Xenofobia 2009, editado por el Ministerio de Trabajo e Inmigración. El trabajo está basado en una encuesta realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) entre septiembre y octubre de 2008, justo seis meses después del comienzo de la recesión.

Cada vez son más los españoles que piensan que el número de inmigrantes es excesivo, que las leyes son demasiado tolerantes con ellos o que los extranjeros hurtan trabajos a los nacionales. Para colmo, el estudio advierte que es previsible que, a medida que siga aumentando el número de desempleados, esas opiniones capten más adeptos. Es decir: es razonable pensar que a estas alturas, más de un año después de que fuera realizada la encuesta en la que se basa el informe, el rechazo hacia los inmigrantes es mayor del que muestran los datos que acaban de ser publicados. Éstos son algunos de ellos:

- Hay demasiados inmigrantes. En 1996 sólo el 28% de los españoles decía que los extranjeros eran "demasiados". La cifra creció hasta el 60% en 2005. En 2008, tres años más tarde, la suma entre los que valoraban su número como "excesivo" y como "elevado" se había disparado hasta el 77%.

- Las leyes son demasiado tolerantes. Eso es lo que opina el 42% de los españoles (18 puntos más que cuatro años antes). Si a ellos se les suma el 32% que las considera "más bien tolerantes", cabe concluir que nada menos que tres de cada cuatro encuestados demandan una política de inmigración más dura.

- Expulsión de parados y delincuentes. El 68% considera muy o bastante aceptable que sean expulsados "los inmigrantes legalmente instalados que cometan cualquier delito". Y cuatro de cada diez encuestados se muestra "muy de acuerdo" o "más bien de acuerdo" con la siguiente afirmación: "Si alguien que viene a trabajar aquí se quedara en el paro durante mucho tiempo, debería ser expulsado del país".

- Los españoles, primero. El 42% de los encuestados cree que los españoles deberían tener preferencia a la hora de acceder a la atención sanitaria, y un número aún mayor, el 55%, es partidario de que tengan ventaja en la elección de colegio para sus hijos.

- El trabajo, para los nacionales. Nada menos que el 21% considera "muy aceptable", y otro 39% ve "bastante aceptable", que los españoles tengan preferencia en el acceso al mercado laboral. El total de partidarios de esa discriminación asciende, pues, al 60%. Tan solo el 9% la considera "nada aceptable". El 23% cree que es "poco aceptable".

- Freno al asilo político. En sólo un año, aumenta a más del doble (del 11% al 26%) el número de españoles que están de acuerdo con acoger sólo a un número limitado de solicitantes de asilo, aunque se haya comprobado que están realmente perseguidos.

- Crece la oposición a dar derechos sociales y ciudadanos. Cae el número de personas partidarias de conceder derechos sociales y de ciudadanía a los inmigrantes, aunque éstos estén "instalados en España de manera estable". Solamente el 55% de los encuestados les daría voto en las elecciones generales, el 69% lo haría en los comicios municipales y también el 69% defiende su derecho a la obtención de la nacionalidad.

- Demasiadas ayudas. Los inmigrantes son el grupo de población que más protección recibe del Estado. Eso es lo que opina el 58% de los españoles (cuatro puntos más que en 2007). Y uno de cada dos encuestados afirma que, aunque tengan los mismos ingresos que los españoles, se les dan más ayudas sanitarias y educativas.

- Los extranjeros deterioran los servicios. Crece la asociación entre la inmigración y el deterioro de los servicios públicos (sanidad y educación), pero también aumenta la opinión de que los extranjeros deterioran las condiciones laborales, hacen aumentar el desempleo y, "al aceptar sueldos más bajos, hacen que bajen los salarios" de los españoles. Por el contrario, también crece (en dos puntos) el número de los que piensan que los inmigrantes "desempeñan los trabajos que los españoles no quieren hacer".

Foto de Alfredo Cáliz

Tres de cada cuatro españoles, a favor de endurecer las leyes de inmigración

La población aumenta su rechazo a la inmigración y pide leyes más restrictivas, de acuerdo con el informe Evolución del racismo y la xenofobia en España (2009) presentado por el Observatorio del Racismo del Ministerio de Trabajo e Inmigración. Un 42% de los casi 3.000 encuestados ve "demasiado tolerantes" las leyes que regulan la entrada y permanencia de extranjeros en España, lo que supone 18 puntos más con respecto a la última vez que se planteó esa pregunta hace cinco años, cuando respondió en ese sentido un 24%.

Si se suma el 32% que juzgan las leyes "más bien tolerantes", se deduce, según el Observatorio del Racismo, un "acuerdo unánime hacia el endurecimiento de las leyes de inmigración". La proporción total engloba a tres de cuatro ciudadanos, mientras que hace cinco años se reducía al 56%.

La mayoría de los encuestados está a favor de que los inmigrantes mantengan su cultura y costumbres, pero siempre que se adapten a las normas que configuran la vida en sociedad y que "no molesten al resto de los españoles".

Sufragio y reagrupamiento familiar

En cuanto a los derechos de los inmigrantes, el sufragio en las elecciones generales es el que cuenta con menos aprobación. "Apenas el 55% de los encuestados se posiciona a favor de su concesión. Ello a pesar de indicarse en la pregunta que su concesión sería a inmigrantes instalados en España de manera estable' y no a 'toda persona extranjera que trabaje habitualmente en España', como se decía en las encuestas del CIS hasta 2005".

En cambio, hay mayor acuerdo con la concesión del derecho al voto en las municipales. Se registra un aumento de siete puntos respecto del derecho de sufragio en los comicios generales. El 62% cree que los inmigrantes residentes en España de manera estable deberían tener derecho a votar en las municipales. Junto al derecho de sufragio, el de reunificación familiar es el segundo que mayor caída registra. De un 86% de aprobación se pasa al 80% en sólo un año.

Por otra parte, uno de cada cuatro encuestados no muestra más simpatía por ningún colectivo en especial, el 12% por los latinoamericanos, el 5% por los africanos y el 4% por los argentinos.

Danza y nostalgia entre exiliadas


¿Qué significa ser extranjero en un lugar? ¿Sentirse un extraño o ciudadano del mundo? ¿Y qué sucede cuando además se trata de una mujer inmigrante? A estas y otras preguntas quiere responder la coreógrafa peruana Karin Elmore, que desde hace tres años explora el rol de las mujeres extranjeras en distintos países con su proyecto Tu cuerpo, el mío, que se representará en el Museo Reina Sofía en el marco del festival Ellas Crean (www.ellascrean.com).

"La idea surgió de una reflexión como peruana y residente en Barcelona que contemplaba el problema de la inmigración y el rol de las mujeres. Quería que fueran ellas quienes contaran sus historias y formaran parte de un trabajo común con las coreógrafas españolas Paloma Calle, Amalia Fernández y Mónica García. Nosotras, como coreógrafas, trabajamos con el cuerpo, y ellas en muchos casos también; atienden el cuerpo de otros como ancianos, o niños o bien hombres en los casos de prostitutas", explica Elmore.

Con este punto de partida llegaron a su taller 35 mujeres anónimas de 12 nacionalidades distintas, que durante una semana compartieron sus sueños y sus miedos, éxitos y fracasos. Sus voces, a menudo ignoradas, contaban historias de nostalgia y superación que finalmente se convertirán en danza. "Tras la primera parte del taller y puesta en común, las coreógrafas han seleccionado a 12 de esas mujeres para que bailen en el estreno. Ahora mismo el grupo se ha dispersado en subgrupos y continúan los ensayos por separado", explica Ana Cristina Rubio, ayudante de dirección. Mientras las discípulas de Paloma Calle trabajan la improvisación, Amalia Fernández y Mónica García preparan sendos duetos, y Karin Emore ha regresado a Perú para continuar allí este mismo proyecto.

El colectivo internacional de bailarinas se propone poner en común sus trabajos a la vuelta de Semana Santa y definir lo que será una puesta de escena atípica. "Nuestra idea es representar la coreografía sin asientos, creando un circuito que se mezcle entre el público, que estará de pie. Queremos experimentar y ver cómo funciona ese intercambio que se verá apoyado no sólo por los movimientos y el gesto, sino también por objetos típicos de cada país", describe Rubio. Del 6 al 9 de abril se podrá comprobar el resultado final de esta coreografía sobre la inmigración en la sala de Protocolo del Reina Sofía.

Tomado de El País